Yojanna Victoria Agudelo Hurtado

Puritana

La piel del puritanismo está ardiendo, es un fuego que recubre las entrañas y se desboca en deseo, que humedece los labios y excita la lengua, arde lento... como cociendo la conciencia, dejando libre la imaginación para jugar con ella. Llueven las ganas de ensuciarse la espalda, de rasgar las sabanas, de saborear la sal de su boca, es insoportable, es necio; pobre... puritana envuelta en llamas, envuelta en doctrina y negación.