Mireia Polo Cardona

QUE NO ME ENTIENDAN

 
Me gusta que no me entiendan
y que tampoco me entiendan.
Camino con la luna en mi cabeza
y al lado, como moscas, las estrellas.
 
Cuando recorro las aceras
me gusta que no me entiendan.
No traten de buscar, no pregunten,
pueden no recibir respuesta.
 
Puedo reír de pena
o puedo ponerme a bailar,
tirar por el mar los problemas,
puedo llorar por llorar.
 
Y si digo que las piedras
pueden venir del cielo,
no me hagan caso, ya es primavera y,
a veces, solo digo lo que pienso.
 
Y como lo que quiero es
que nadie me entienda,
esto no basta, no hay versos,
mi alma no cabe en este poema.
 
Y si el mar me insinúa que
quedan muy saladas las cerezas,
las pondré al sol, se harán morenas,
para que nadie me entienda.