Ely.M.

Sol

Cuando aún no me levanto

tú ya estás.

Iluminando mi casa

y la de los demás.

Mostrándote ante todos

e iluminando sus caminos.

Y además de iluminarnos

también nos quitas el frío.

Cuando llega el invierno

no quiero que llegue el atardecer.

Pues mamá me gritará de nuevo

que ya me debo meter.

Y entonces el juego acaba.

Y me debo despedir,

de ti y de mis amigos,

pues la luna está por salir.

Me deberé dar un baño,

cenar y después a dormir.

Para esperar otro día

y verte de nuevo salir.

Para jugar con mis amigos

Bajo los grandiosos rayos

que salen de ti.