Raiza N. Jiménez E.

Mi Ángel Guardían.-

Entre lágrimas abundantes de nostalgia y de dolor.

Hoy recordaba, a esa mujercita que, era mi abuela.

Usaba el pelo largo y blanco, evocarla me consuela.

Era muy chiquitica, menudita, flaca y llena de amor.

*-*

Era la luz de mi niñez, visitarla, me llenaba de furor.

Si estaba con Ella, corría, para llevarme a la Escuela.

Cuando supe que, Ella murió, fue para mí de terror.

Por años, esa tristeza profunda, me dejo, secuelas.

*-*

No es fácil, ya lo sé, hablar con un niño de muerte.

Soy enemiga de las mentiras piadosas, he acá, una.

Aprendí, viviendo en dolor que, hay que ser fuerte.

Eso, lo puso mi abuela en mi mente y es mi fortuna.

*-*

¡Nunca dejo de dar gracias, por haber tenido Abuela.

En tiempos de dolor, Ella desde el cielo, me consuela.