Wilson Delgado

INAPROPIADO

Inapropiado,
no sé si lo será;
esta forma de mirarte,
esta forma de escanearte,
de en mi mente dibujarte
todo lo que he de realizarte.

Inapropiado,
No lo sé!
No puedo evitar sentirme culpable,
por las tan infames per•v𝑒rsidades
que en mi mente empiezo a imaginarme,
con las dudas si la lencería arrancarte,
disfrutar de la textura de tu encaje,
o de placer t★rturart𝑒.

Y es que rompes el ondear del aire
solamente con mirarme,
como ese aroma a deseo
de pasión desbordante.
Ese suspenso intenso justo antes
de la batalla entre dos contrincantes.

Inapropiado,
Quizá...
Pero me arrastras al borde de tu boca
como brasa ardiente,
deseando ser un beso que vibre
y te revuelque en tus adentros
que hasta te haga volar al viento,
que te robe el suspiro y el aliento.

Por desear cada parte de ti,
por explorar cada rincón de tu ser,
por pasear por tu montañas y tus valles,
navegar en la salinidad de mares
y perderme en el laberinto
de tus labios verticales,
mientras con mis dedos alineo
como constelaciones tus lunares.

Así que quizá sea inapropiado,
pero es inevitable no desearte
antes de tenerte en mis manos,
pero cuando se cierre la puerta de la habitación,
daré rienda suelta a la imaginación,
a las fantasías de mis pensamientos más profanos.