alicia perez hernandez

INDELEBLE...

INDELEBLE…

Tengo ganas de verte.

De verte sonreír, llorar, cantar, bailar, amarme hasta enloquecer.

Amarme a mí que poco te veo, y que poco te deseo, en el plano de la vida que hoy habito.

Lloré mil años, mil vidas, mil días y no estabas conmigo.

Nunca fuiste el hombre de mis sueños.

Tengo ganas de verte… ¡Tonterías!

Donde estés y como estés, te pienso, te admiro, y te quiero más que a mi vida.

Te quiero como un pasado que llenaste de recuerdos y de hijos vacíos de ti y de mí.

Fuimos sueños heridos y usados por el tiempo de la espera

de aquellos días que te desee con fuerza y anhelo de quedarme en tu piel,

quería sentirte en mi piel morena, llenarme de ti de mí, de los dos.

Quise todo de ti, hasta cuándo no estuviste en mi boda, solo te imaginé partir.

Partiste sin destino y sin equipaje y sin mí. ¿Tengo celos a donde fuiste ese día?

Sin equipaje de mis amores porque ya estábamos muertos en ese tiempo de espera.

De la espera de tus besos fríos como los de un muerto.

De un muerto vivo y deseoso de tenerme para toda la vida en su cama o catre.

Ese catre que ahora está sin ti y sin mí.

Porque fuimos mucho y nada, tanto y poco, pecado y confesión.

Me confieso que miento cuando digo que te amo.

Confieso que miento cuando estuve contigo en navidad, Semana Santa y amaneceres.

Amaneceres en tus brazos obscenos y en mis noches perversas enredado en mis sabanas.

¿Sabes? No existo me invente para inventarte a ti y cuando ya no te quiera en mi vida

Destruirte, acabarte, olvidarte, enterrarte en mi corazón porque seguro de allí no te vas.

Eres un ser vanidoso, orgullo, con ego de poeta falso, mentiroso.

¡Perdón! no soy yo, cuando me enojo.

Me enojo por nada. Hasta porque no te veo.

Me enojo conmigo por ser una idiota perdidamente enamorada de un idiota.

Después de tantas idioteces que digo.

Eres Un Amor INDELEBLE...

Pienso que te amaré hasta que estés muerto y enterrado.

Hoy estoy pésima. ¿Crees qué está soy yo?

Solo soy alguien que se cruzó en tu camino para herirte, lastimarte y hacerte feliz.

Pero dejé de ser aquella de la que te enamoraste y ahora soy tal como soy.

¿No sé qué fuiste en mi camino maldición o bendición?

Nunca MAS seremos aquello que fuimos amigos y enemigos.

Solo seremos un INDELEBLE pensamiento en tú vida y en la mía.

 

Alicia Pérez Hernández… México

No es la pluma la que escribe, es el alma

Todos los derechos reservados©

No te quiero sino porque te quiero
y de quererte a no quererte llego
y de esperarte cuando no te espero
pasa mi corazón del frío al fuego.

Te quiero sólo porque a ti te quiero,
te odio sin fin, y odiándote te ruego,
y la medida de mi amor viajero
es no verte y amarte como un ciego.

Tal vez consumirá la luz de enero,
su rayo cruel, mi corazón entero,
robándome la llave del sosiego.

En esta historia sólo yo me muero
y moriré de amor porque te quiero,
porque te quiero, amor, a sangre y fuego.

No te quiero sino porque te quiero (soneto LXVI)