Salva Carrion

Un viejo galeón singla escorado

 

Un viejo galeón singla escorado

sobre una mar brava de olas de acero,

con medio trapo arriado, es altanero,

bajo un cielo de negro encapotado

 

Contra la fuerza del viento amurado

el timonel mantiene firme el rumbo;

surcando el agua a golpe de retumbo

rompe las blancas crestas aproado.

 

Amanece fresquito, amaina el viento.

En la cofa mayor, grita el vigía:

“¡Tierra a proa!”, canta sin desaliento!.

 

Unas millas hasta arribar a puerto.

Con bríos y salomas de alegría,

las velas se izan con el sol despierto.

 

-En la dársena, despacio hacia el muelle-,

atraca el piloto con energía.

Los marinos tensan el tiempo muerto

y, al fin, con ron brindan por la estadía.