Alex R. Palacios

JCarolina..

Amiga, siempre estás corrigiendo mis planas,
o una que otra palabra que se me escapa.
Yo intento ser poeta, aunque me falta mucho por aprender,
pero me falta tinta en el tintero para lograr hacerlo.
Solo soy un soñador que escribe con el corazón,
con la esperanza de que mis palabras puedan tocar
el alma de alguien que las lea.
Espero no molestarte, tú que eres poeta de verdad,
con una habilidad para las palabras que yo envidio.
Me inspiro en la tonada de una canción del recuerdo,
en los sabores de los alimentos que me hacen sentir vivo,
en las aves de tu bello país, que cantan con tanta pasión.
Hoy escribo estas letras para darte las gracias,
aunque no soy poeta, solo un amigo que aprecia tu arte.
Mi amiga poeta, gracias por ser una fuente de inspiración,
por mostrarme que las palabras pueden ser un arma poderosa.
Y aunque el café se enfríe o se caliente,
estará pendiente para una de estas tardes,
de novelas y uno que otro ensayo.
Gracias, amiga poeta, por corregir a este aprendiz,
por ayudarme a mejorar y a encontrar mi voz.
En tus correcciones, encuentro un tesoro de sabiduría,
un regalo que agradezco con todo mi corazón.

 

Por: Alex Palacios