jvnavarro

DESDE DONDE VIGILAN LOS MOCHUELOS

No me digas nada
que no esté escrito en el viento,
nada que sea cosa diferente
a que puedo tocar el cielo,
quiero ver desde la rama alta
desde donde vigilan los mochuelos,
el olivar eterno,
con sus raíces absorbiendo
los besos de la noche,
los recuerdos,
de quienes sobre la tierra
los pies puestos,
hicieron de sus vidas
un experimental invento,
en el que todo era humanismo ciego,
en pro de la naturaleza
aunque esta generara desconsuelos.
 
La pobreza de los pobres
en el olivar viviendo,
las angustias en las ramas
conviviendo con los mochuelos
y bajo la tierra
las raíces alimentando los cuerpos
de quienes salían a la luz del día
con lo puesto
y volvían desnudos de perjuicios
sumidos en un viejo sueño,
dar y dar y dar 
y si dando algo 
se recibe un poco,
del todo que queremos,
es que al final la vida
se alimenta de sentimientos,
y ya muertos,
que más da
 si tuvimos,
o nos fuimos 
tiesos al cielo.