Haz Ámbar

Devaneo frecuente

La transición que aborrezco se hace un hueco en mi nuez

y no hay quien dios hoy lo niegue que estoy haciendo territorio

para pronto volver a ponerme en oferta...

Estoy tan tenso sucede que puedo verlo desaparecer nuevamente

bajo un halo que tenue aún aumente esa cólera

por poseerla en su fiebre. Vil conciencia perpetua,

aquí roto me tienes...

 

Tu fuerza telúrica erradica mis genes

débilmente sombreada por la luz

de una luna aún ausente

en los barrios más célebres,

mutua cómo se presta en virtud

tantos honores merece

como pueda mi espíritu

concederle a su tímida industria.

Que recen cuando asoma esta música 

adherida a mi grito

con tan nuevo ímpetu

a pesar de lo dicho y repetido mil veces.

Tras el cristal te diviso

sumergida en vaivenes

que se llevan tu risa a lo divino,

a donde llueve

entre fronteras incluso

su azar sempiterno

de traiciones estúpido.

 

Aquí me refugio

de esos trenes que vienen

a torcer mi figura

repintando escasez

en un túnel secreto

que se oculta en tus pliegues.

Estaré por siempre sereno

si conmigo te prestas

a un baile que sea 

eterno en su devaneo frecuente.