Perros callejeros
Se ha de ver su ilusión sin la palabra
En su alegría de saltos y en sus ojos
De estos canes en abandono
Dónde estos peludos pares
Tal vez pretéritos nuestros
Pueden sin pretenderlo
Dictarnos a nosotros
sentires que renegando no acogemos
Porque darían a la bondad sus alas
Las cuales poco desplegamos
Al creernos sin huella en el tiempo
Cuando un dos sobre cinco sobrepasa
Nuestra capacidad de actuar cual ellos
Por sentirnos señores de las horas
Sin ser esta potestad nuestra
Porque quien trasmutó el agua en vino
De su andar dejó pocos rastros
Que Milei niega con esmero
Y la izquierda de los muchos aprovecha
Queriendo destruir los Firulais
En calles sedientos y en huesos
En busca de sustento entre desechos
Porque este mundo hipercomplejo
No tiene lugar para ellos
Y cual ninis humanos vagabundos
Son dejados de lado en la carrera
Afectados por un supuesto olor añejo.
Ricardo Muñoz – Milkas