ENRIQUE HORNA

SOLEDAD DEL HOMBRE

El hombre y su soledad

Un sendero lleno de sombras

Calmado silencio del tiempo

Abrigando su espíritu

Instancia tocando su ser.

 

El hombre oyendo sus latidos

Aflojando la rienda del afecto

Labrando a solas

La razón de las ausencias

Melancólica noche

Rutina sin estrellas fugaces.

 

No están los niños, la mujer

Las palomas blancas del hogar

Las alegrías simples servidas

En una tarde de risas

Travesuras de cinco y seis.

 

Ojos ansiosos levantados

Hacia el horizonte

Suspirando blancos y azules

Brazos del vacío

Exiliados de la ternura

Besos saboreados sin ruido.

 

EH