El paisaje nocturno
nos embriaga de ausencias y recorte.
Invade la nostalgia, hace la corte.
Junto a lo taciturno
la incompletud sutil de la esperanza,
completa la figura.
En punto muerto queda la espesura.
Retrata la confianza
de verte en tu regreso... y del albor
con sonrisa simiente.
Milagro de la luz porque desmiente
la falta comprobando su rigor.
En la honda oscuridad
esfuma aquella carga de orfandad
un tibio resplandor.
©JoséLuisGalarza