Bolívar Delgado Arce

FÍSICA CUÁNTICA / MORTANDAD

Miles de bocas amargas,

de pieles amarillas,

sin alarmas

fueron desarraigadas hasta el nombre

y nunca sabrán si fue

fusión o fisión;

ni las espaldas inocentes de víctimas

invisibles desde entonces,

que cargaron kilotones

megatones de infinidades

cuánticas, pero suficientes

para teñir la esfera

para tronar y llover fuego

angustia, muerte y llanto duraderos;

y que sembraron -en la gran prueba-

miles de reventados

calcinados

desollados cuerpos

por el fragor atómico

y el grito ígneo

de la atroz heredad de mil volcanes…

Nadie tocó su sangre

desde Hiroshima

a occidente,

sino fúnebres campanas

hasta ahora

y para siempre,

si ese siempre suena

a rosas desnudadas,

y despetaladas ante el estupor

y la tristeza de un mundo

inmovilizado, aterrado, absorto

que ha de respirar por sus raíces

protones, electrones, sueños

e incógnitas de sabios,

como las certezas

de físicos,

que avizoraron terror,

infernales explosiones

y estragos…

¡Oppenheimer!

¿sabes que aún nadie escruta,

digiere, entiende ni describe

tu ígnea incógnita descifrada

en el horrorizado e inédito

grito de 6-9-8-45,

desde El Álamo

a todos los Nagasaki en la tierra...?

pero sí, que está roto

el infinito orden,

y que todo se mueve

entre el dintel de tus fórmulas mágicas

-que te atormentaron-

y la implosión de agujeros negros

que se lo tragan todo?

 

               Bolívar Delgado Arce