SUGEL R

De la torre oscura

No siempre sembraremos mientras otros cosechan el incremento dorado de la fruta que esta ya. No siempre semblante, abyecto y mudo, que los hombres menores deberían mantener a sus hermanos bajos. No eternamente mientras otros duermen ¿Seduciremos sus miembros con una suave flauta? No siempre te doblegues ante algún bruto más sutil. No fuimos hechos para llorar eternamente. La noche cuyo pecho de sable alivia lo crudo. Las estrellas blancas no son menos hermosas siendo oscura Y hay capullos que no pueden florecer en absoluto en la luz, pero arrugarse, lastimarse y caer. Así que en la oscuridad escondemos el corazón que sangra Y espera Y cuida nuestras agonizantes semillas.