Mauro Enrique Lopez Z.

Entré chillidos

Entré chillidos, chillidos de gaviotas, 

buscando su alimento a la orilla 

del mar, yo esperando que lleguen 

los pescadores en su embarcación

porque ellos son las esperanzas que 

traigan algo de pesca, para ser 

bendecido del pan diario. Grandioso

es nuestro, Señor que hubo hasta para 

alimentar a las gaviotas... que alegría 

teníamos!!! que se pudo obtener el 

sustento para la casa, gracias 

al Creador por sus bendicion a diario.