Haz Ámbar

A golpe de calle

Tengo esta sed, 

tan real como la pared

en que marco mis días prisionero, 

y un oculto destello que me doblega, 

que me hace parecer tal vez de piedra

ante el azar de los hechos

resuelto yo a perderme, 

y siempre en deuda

hasta que enferme

de mi frustración primera, 

hasta que tiemble y palidezca

ante la ola creciente de seres

que disienten, 

que me encuentran para siempre en mi rincón 

con la fiebre que me asalta aquí de incógnito

y ya sin dios que me soporte:

estoy de sobra

haciendo la ronda 

por el cementerio de ilusiones

que cargo dentro

a trompicones por las cuestas:

ves mi esfuerzo en estas horas 

por salir del agujero

detrás del rastro de devastación de estas quimeras

(estoy sintiéndome ligero

solo de pensar que tú me llevas lejos...).