José Antonio Artés

CAMPOS DE DAIMIEL

Viento agradable la moto sortea
al viajar por territorio manchego
donde los serios cipreses sombrean
la luz que el sol difumina con fuego.
 
Soldados los olivos se alinean
en formación de desfile marcial.
Las amapolas adornan los bordes
de los campos de viñas al pasar.
 
El trigo dora los amplios parajes
ofreciendo resguardo a las aves 
que festejan su corto aterrizaje
en busca del grano que mejor sabe.
 
Espinos  y cardos se preparan
 para  la ansiedad de los conejos
aromatizados por cada jara
que adornan los límites a lo lejos.
 
¡Oh, llanura central de La Mancha
en el valle que el río se acomoda,
donde las aguas claras se ensanchan
en cañadas y acequias que enamoran!
 
¡Donde beben las garzas imperiales,
la focha moruna y la malvasía
entre los accesibles humedales
que hacen que sean una maravilla!
 
 
José Antonio Artés