Syol *

AÚN PENDE LA NOCHE

 

 

AÚN PENDE LA NOCHE

 

Salta al vacío la estrella amanecida,
se abre naranja la mirada sobre el nácar,
rodando a destellos la cumbre de cera,
despierta la opuesta pradera,
donde luciérnagas acunan las auroras,
y el rocío breve en álamos asoma.
 
Huyen agua y carmín al fuego de siglos,
que manso revela arena en las cuencas,
y amatistas dormidas bajo el río,
monte de liras espía la piedra,
y a primavera de huesos triturados,
gacelas en flor ha deshojado,
el ronco estallido de la fiera,
 
Trineos al polvo cruzan caballos,
tira la ira de bridas y látigos,
penas instruye a velo de oro,
verdugo pulgar de coronas y amos,
ebria está la grada de voces y heraldos,
el ruedo retumba macabro teatro,
viaja la sangre los yelmos plateados,
derribando colosos al final del acto.
 
Pende un gris engranaje de buitres,
atado a los vientres derramados,
antorchas agonizan al voraz convite,
ya posado en los cuerpos apagados,
allá de puntillas, devora peldaños,
la túnica oscura de legiones y pastos,
libados al hambre de bestias y años.
 
El cielo supura el latir de una estrella,
germina la noche meciendo los dardos,
que duermen de espaldas a la tregua,
rota, en el naranja inmaculado.