Llegas y te atas al pie de mi cama
con un disimulo muy pertinente
velando ese, mi sueño tan ausente
que está desvelado dormido en tu alma.
Y salgo de viaje muy de madrugada
surcando ese cielo azul y estrellado
en busca de eso por mí anhelado
mientras tú robas un beso a mi almohada.
Amantes que en el lecho compartido
se embriagan de un versar bonito
ese palpitar que se presenta infinito
sin frenos se despojan en un solo latido.
Dos golondrinas que sí hacen verano
aún cuando las nubes se precipitan
esos deseos que entre ambos dormitan
que sólo deberán despegar más temprano.
Una linda historia de amor incondicional
que traspasa los límites y cordilleras
no fue frenado ni por aquellas fronteras
dejando en la memoria un sello emocional.
***Omaris Redman***
Mayo 5, 2023