Llaneza

Efímero pero bello

La atracción sexual 

surgió con un dulce beso

él me prodigó atenciones 

que jamás pensé tener,

sus caricias tan sublimes 

me incitaban 

al deseo y el placer,

el clímax , uhmm

era placentero y divino,

en cada encuentro 

el compartir era bello...

me conmueve recordar

que todo lo efímero

tiene un triste final 

y solo le pude decir,

¡gracias, adiós!

con lágrimas vivas.