gerardo villalobos

SONETO ARREPENTIDO

Aquel jilguero gris que te cantaba

Desdeña irreverente mi presencia

Y aquella luna blanca por tu ausencia

Me culpa con recelo en la mirada

 

Aquel viejo arcoíris que alumbraba

Desangra de colores mi existencia

En blanco y negro yace si te piensa

El sol aquel que tu calor me daba

 

Regrésame al paisaje de tu arrullo

Que la intemperie apaga mis latidos

Perdóname!, que el valle entre cantíos

 

Aun siente sollozando los cocuyos

Por este corazón que ya no es mío

Por este corazón que es todo tuyo

 

Gerardo Villalobos