Freddy Kalvo

Todo se termina

 

¡Todo, todo se termina!

Se termina el universo

las arenas de la playa

las estrellas y luceros

las lagunas y montañas.

También bosques, también cerros

y también inmensos mares

con sus golfos, sus esteros,

penínsulas y manglares.

Lo que existe en ancho cielo

y lo que hay en esta tierra,

sea viejo o sea nuevo

todo, todo se termina,

aunque no vayan creyendo.

 

Y al no haber más nubes grises

ya no habrá más aguaceros

ni jardines florecidos

con sus pétalos tan bellos.

Ni las ramas de jazmines,

donde cantan los jilgueros;

ni palomas con sus trinos,

si feliz amanecieron.

 

¡Todo, todo se termina!

Se terminan los tormentos

los dolores y pesares

las angustias y los miedos

arrogancias y soberbias

junto con los mismos celos.

Y los ríos cristalinos

con rocío siempre fresco

se terminan poco a poco

¡Y vaya que pocos veo!

Van quedando solo piedras

y volviéndose desiertos,

cual desierto del Sahara

con paisajes siempre secos

donde nunca encuentras agua

solo estelas de camellos,

dromedarios y culebras

que se arrastran por el suelo.

 

¡Todo, todo se termina!

No soy sabio, pero pienso,

que al morir se acaba todo

sea malo, o sea bueno.

Porque no verán mis ojos

lo que existe, si los cierro,

el día que yo me marche

sin retorno al cementerio

a mi lúgubre morada

con mi sueño más eterno,

porque junto con la muerte

van también todos los sueños.

 

Y la luz del sol radiante

se me apagará en el cielo

cuando me arrope la noche

con su helado y suave viento.

 

Y terminará la vida,

cuando al fin me encuentre muerto;

y mis ojos ya cerrados,

no verán el universo.

Para mí, todo termina,

cuando el cuerpo tienes yerto.

Y será mi fin del mundo

mas mis versos, yo les dejo,

como estelas dibujadas

de mis buenos pasatiempos.

 

Y si acaso sigo vivo...

¡Será solo en los recuerdos!