Sergio ventrice POEMAS Y PROSAS DE ESO SE TRATA

POETA


  Hablemos de poesía. Se me ocurre       que Dios no sabe sus palabras tristes.       Y yo tampoco sé por qué las tardes       en sus lejanos ojos se hacen grises       o sus primeros versos callan distraídos       en el instante de morir un cisne.    
  Decir la mar es pronunciar poesía.       Decir poesía es no sé qué mentirse.    
  Ella soplando el corazón del hombre       con fuego amargo en el papel escribe.       Si está la rama próxima a romperse       porque la luna loca al mar lo riñe,       yo sé que la poesía se desata       con grandes olas en poetas tristes.       No buscan pájaros ni luz sus versos.       Persiguen la razón por qué morirse.