Alfredo Saez

-LAS VACAS HUMANOIDES-

 

 

Las vacas, una a una,

van pasando al matadero.

Vivieron el privilegio de los pastos ricos

que engordaron cortes de exportación en el paisito.

Se creyeron listas en su soberbia mendaz ante el amor toruno:

amor capado, inconcluso, eunuco.

Pero llegaron estos Años Twenty… y fenece la gloria triste y temporal

¡las echan al redil  ó  a  que renuncien!

Formas de existencia muy  gemelas a la de ciertos homo sapiens,

homo sapiens del Uruguay.

Sí, los del Poder formal, casi siempre intruso, infértil y vertical,

falso, inocuo e inicuo.

Las descerebradas vacas…van cayendo, una a una.

Sin redención.

Apenas un amorfo perdón de sobreseídas causas.