Jean Amador

La Cara Oscura de la Luna

Renunciaría a la luz en mis ojos antes que verte,

como la guitarra añora sus cuerdas en silencio.

Dejaría mis manos en el olvido, aunque mi música llore,

similares a raíces que no tocan la tierra.

 

Arrancaría de mí la esencia, antes que sentirte,

cual árbol sin frutos, en un otoño eterno.

Que se marchiten mis dedos, al rozar tu piel, inadvertida,

como flores que se deshojan en un cruel invierno.

 

Devoraría la negrura del cosmos, si no eres mi estrella,

como la bestia que desgarra su propia carne en su descontento.

Borraría mis pensamientos, si en ellos no residen tus sombras,

cual laberinto sin salida, en el que me pierdo y sucumbo.

 

Desintegraría el tiempo, si no pudiera hallarte en él,

como el eco de un reloj que se pierde en el infinito.

Absorbería la oscuridad de un agujero negro, si no te contemplo,

cual ser devorado por la insaciable vorágine de un abismo celoso.