Mente finita, limitada por la carne,
En el velo de la ilusión se sumerge y se desgarra,
en el laberinto de la existencia se extravía,
sin ver más allá de la bruma que lo enmascara.
Las palabras, los conceptos, las ideas,
son meras sombras de la realidad eterna,
que trasciende nuestra limitada percepción,
y se despliega en una sinfonía sempiterna.
La mente humana, con sus limitaciones,
es incapaz de ver más allá de la ilusión,
y se aferra a su ego y a sus vanidades,
sin comprender la trascendencia de la creación.
Solo la intuición y la revelación divina,
pueden llevar al alma más allá de la ilusión,
y permitirle contemplar la luz eterna,
que trasciende la mente y la limitación.
¿Qué es el ser ,es...
un constructo mental sin fundamento,
en un mundo de constante deconstrucción,
de lo que creemos ser y lo que no es cierto?
El ser, la esencia, la realidad,
son conceptos que se desvanecen,
en la inmensidad de la complejidad,
de un universo indiferente que se expande y crece.