Pedro Antonio Borges Rodríguez

LOS MANDATOS DEL CORAZÓN

Son tús ojos un delirio 

Que por mi ventana atraviesa

Es tú amor, mi martirio

Si no me tocas y besas 

 

Yo quisiera serte fiel 

Aún cuando exprimas mi osadía 

Del alma blanca hasta la piel

Abarcando toda mi alegría 

 

 

Yo me educo en el querer 

De los corazones valientes

No dejo nada por hacer 

Pero aún así, no convence 

 

Queda todo por tejer

En la red del amor unificado

Luz de luna al atardecer

Y tú corazón sosegado 

 

Una lágrima quebró la tierra 

Abriendo en dos, el manto 

En medio quedó una grieta 

Por donde se coló mi llanto 

 

Al saber que a otro amas 

Sentí un fuerte crujido 

Y al verte con él en la cama 

Me sentí desprotegido 

 

Hoy estoy roto por dentro 

Mi alma se ha apenado

Sigo sufriendo y no encuentro

Mi amor inmaculado