Alfredo Olhede

Mi margarita linda

Tu belleza es incomparable aun inexplicable.

Tu voz suena como una melodía como cuando los flores brotan en verano.

Ojos en el color como los pistilos de margaritas y pestañas lindas como pétales.

Pero raramente te hablo porque nunca tengo las palabras correctas o porque eres como un jardín de lilas que no quiero pisar.

Pero como un día se desaparece con un puesta de sol se me va la alegría también cuando tu te vas.