Freddy Kalvo

La triste agonía

Muy triste es el color de la agonía,

tan triste como el cielo oscurecido;

diría, que es tan triste cual olivo,

que muere cuando el tallo se marchita.

 

Quisiera eternidad para la vida

y blanca fuera siempre como un lirio

con ese rico aroma que respiro

halado por la tenue y fresca brisa.

 

Quisiera lo que pienso y no es posible

las leyes de la vida están cifradas

pues llega ese momento de dormirse

 

sereno, sin decir ya más palabras,

que digan que regresas porque existes

pues nunca mirarás otra alborada.

 

Si la vida se acaba...

¡Disfruta a plenitud cada momento,

que nada gozarás estando muerto!