Alfonso J Paredes

De tanto mirar, ยซ๐“’๐“พ๐“ช๐“ฝ๐“ป๐“ธ ๐“น๐“ช๐“ป๐“ฎ๐“ณ๐“ช๐“ผ ๐“ญ๐“ฎ ๐“ฎ๐“ท๐“ญ๐“ฎ๐“ฌ๐“ช๐“ผ๐“ฒฬ๐“ต๐“ช๐“ซ๐“ธ๐“ผ ๐“ฌ๐“ธ๐“ท ๐“ญ๐“ธ๐“ซ๐“ต๐“ฎ ๐“ผ๐“ฎ๐“ท๐“ฝ๐“ฒ๐“ญ๐“ธยป

En un lugar de la tierra «allí estabas»,
como un lagarto asomándose al sol.

Moran los dragones «en esas cuevas»
acechando con sus bolas de fuego.

Miraba de soslayo, «te acercabas»
el caballero tuerto y su caballo.

Oteaban al espejo, «con las nuevas»,
encontrándose solo en sus reflejos.

El anverso del verso ©2023
Alfonso J Parades.