Arcos

Banca de angustia

Una banca de un parque

me acompaña en mi pensar,

tratando de encontrar un camino

que a ella me pueda retornar.

 

El viento que golpea mi rostro

lleva hojas, polvo y más,

aunque fuese huracanado

no podría con mi pesar.

 

Flores coloridas,

aves de trinar,

cielo azul marino,

brisa céfiro primaveral,

no pueden doblegar los gritos plañideros

de esta angustia que mi pecho

no consigue dominar.

 

Dejaré a mi compañero 

y, trashumante,

voy al viento acompañar,

tal vez al elevarme

logre alcanzar

un lugar despreciado y frío

en el más allá.