Dara Sanz

Miłość, kocham cię

Noche oscura de estrellas derramándose 

Sobre el ocaso, mientras que se asoma entre el alba oscura y translúcida.

Pues, es el deseo que se vuelve eterno.

El deseo que tras convertirse en oro líquido,

Un jadeante respirar anhelo escuchar.

 

Somos dos sombras embestidas por una confusa y violenta marejada.

Es pues, que quiero rozar y deslizar mis llenas por todos los contornos de tu piel,

Es pues, que quiero deslizar los perfiles de tus entrañas y descubrir aquella figura pasiva y espectante a un juego de esperpentos.

 

Es pues, dulce y delicada flor, que deseo delizar la desnudez de tus alas, la desnudez de tu brisa que me acaricia día a día y que mi sonrisa se convierta en cicatrices estrechas de bellos recuerdos contigo.