José Domingo

Tanto

El reloj de la cocina cuesta verlo
está tan alto
colgando en la pared

Con tanto terremoto uno no se fía
que cualquier día podría caer
si no está seguro 

A saber si durará como el otro 

Tiene prisa el segundero
nunca para, ni siquiera para beber agua
siempre corre, siempre
¡el tiempo corre tanto!