cherry love

Seguimos siendo nuestros

El resplandor de la luna plateada
nos construyó una barcarola de sueños.
Y nos fuimos a navegar por el universo
con las alas de libertad que el amor brinda.

 

Fue la noche más sublime de nuestras vidas.
Nos sentíamos eternos.
Yo derramé unas lágrimas
como presintiendo desdicha.

 

Nuestros cuerpos ávidos de cercanía
construyeron océanos de felicidad.
Pero la marea se desbordó altanera
arrastrándonos por distintos senderos.

 

Yo morí sin tu aliento,
tú te volviste ciego.
Jamás volvimos a vernos…
Pero seguimos siendo nuestros.

 

Alicia Rivas