Se puede ver , casi transparente pero lo he llegado a divisar, como un reflejo, una sombra cruzándose casi flotante, una alucinación o una revelación de la inestabilidad emocional de un escritor, atormentado por ventiscas que le hacen trasnochar, la simple imagen que al contemplarla, golpea el corazón como una bala, ¡Ay! Que lluevan almas, todas tendrían espacio en mi pecho para resguardarlas, no debo ninguna lágrima y aun así mi cuerpo tiembla como queriendo mostrar sollozos.