Malli Tlahuani

No puedo detener el amanecer.

Quisiera que la noche durasé más,

por la mañana no me interesa existir,

el ataderdecer, alimenta mi alma,

y por las noches no logro dormir.

 

Te espero,

lento avanzas.

Me pierdo tanto en ti,

que de pronto,

ya distingo el rosado provocado por K\'inich,

y los sonidos de la sociedad.

 

Te vas, 

no quiero,

detenerte,

no puedo.

Te esperaré,

sé que volveras,

me dormiré,

hasta verte  de nuevo,

porque no vale la vida, nada más.