Felipe Valenzuela

Luna roja

Musa, mujer y dueña del arte

Dame los ojos para reflejarte

En los espejos cristalinos

Nacidos de tu extirpe belleza,

Dame un corazón que en latidos

Choque irruptuoso ante esa

Que ha de ser la inspiración

-Velo blanco sueño onírico-

De poema y alabación,

De mi amar y lo lírico,

Que sea cada oración,

Que sea cada verso

Y cada escrito

De mi alma.