alicia perez hernandez

DOS CUERPOS Y UN ALMA

DOS CUERPOS Y UN ALMA

Mi alma está ligada a ti y sin querer tú, tu alma se incrustó en la mía.

Una noche de invierno tú con fuego en tus manos mi cuerpo acariciaste,

Y fuimos dos cuerpos, que se complementaron, juntándose alma con alma, en un

Solo cuerpo, una vida, un solo corazón, para sentirnos y tenernos en comunión desde

aquella noche que tocaste a mi puerta yo la abrí con ganas de amarte y ser amada.

Y fue así, como te invité a dormir en mi piel, a soñar en mi boca todas las delicias

del amor, con la pasión de dos vidas gemelas, que el destino juntó.

Erase un alma que buscar alojó deseaba, y encontrar un alma buena donde habitar,

¡¡Y fue así como Dios te puso en mi camino!!

Yo puse lo demás, la de amarte, tenerte, y saberte mío todos los días de mi vida.

Y ser vida de tú vida y tú vida de la mía, para complementarnos y sabernos los dos

partes de un todo, dando cabida a este amor que me arrojó a tus brazos,

 me siento poseída por tu fuerza que me acerca a tu pecho y me deja sin respirar,

y me hundo en tu cuerpo, los latidos de tu corazón, son los mismos míos, como fuego

en la fragua, sucumbimos a los deseos de la carne, que nos lleva a disfrutarnos desde

los poros de la piel, hasta el aliento ardiente de tu boca y lo depositas en mi boca

en ardientes deseos, nos quemamos en la hoguera y deseando más, más placer, más

tenernos en lecho que arde con la misma pasión de antes que no nos teníamos,

y necesitábamos darnos en cuerpo, alma y espíritu, para juntar los cuerpos en uno solo,

           con el calor que da juntar alma con alma, y vida con vida para poseernos.

Habrá más noches como está porque necesitamos poblar el mundo de amor, que

Sepan amar desde adentro, nos sólo con la carne, el amor alimenta el espíritu,

Y tú alimentas el mío con tus besos y abrazos apasionados que me desnudan

Los deseos y la pasión se vuelven a desatar en dos cuerpos un alma eterna.

¡¡Estoy a un milímetro de ti en cuerpo y alma!!

Alicia Pérez Hernández… México

No es la pluma la que escribe, es el alma

Todos los derechos reservados©