Carlos Andrey Vargas Araya

El deseo de navidad en el hogar de ancianos

Para quienes me leen a menudo,  acostumbro a considerar este como mi espacio de expresión. Poesías, historias y reflexiones, cosas que me inspiren. 

Hoy les traigo la historia:\" El deseo de navidad del hogar de ancianos de Guápiles\".

Les prometo que esta historia tan simple, les permitirá reflexionar de manera profunda ,en el que gastan su tiempo en esta vida terrenal. 

 

El hogar de ancianos de Guápiles en Limón, Costa Rica , se propuso la idea de encontrar padrinos y madrinas que cumplieran el sueño de navidad de los adultos mayores  que residen en este sitio.  Les tomaron una foto con su sueño de navidad 2022 escrito en un papel. Y uno podría pensar con mucha curiosidad, ¿que podrá pedir un adulto mayor?. 

 

 

La simpleza de sus deseos de navidad me conmovió hasta los huesos, porque son cosas que para el común de las personas ,se puede comprar con poco dinero; sin embargo, para ellos es su deseo de navidad. 

 

 

A continuación les dejo la lista de deseos que estas personas adultos mayores solicitaron a sus padrinos y madrinas:

 

 

๐ŸŒŸDon Monchito pidió pollo frito, papas y Coca Cola.

๐ŸŒŸDon Carlos Blanco pidió una radio. 

๐ŸŒŸDon Juan Godinez pidió pollo frito. 

๐ŸŒŸDon Adrián pidió una radio.

๐ŸŒŸDon Guadalupe pidió una camisa talla M. 

๐ŸŒŸDon Rigo pidió una camisa talla S y una caja de helados. 

๐ŸŒŸDon Dagoberto pidió una camisa talla L. 

๐ŸŒŸDon Gerardo pidió un six pack de cerveza marca Imperial y un bistek con tortilla. 

๐ŸŒŸDon Rafita pidió una colonia. 

๐ŸŒŸDon Jorge pidió una camisa blanca talla S.

๐ŸŒŸDon Simón pidió una camisa talla S y un pantalón talla 30. 

๐ŸŒŸDon Juan López pidió una colonia. 

๐ŸŒŸDoña Engracia pidió camisetas de tirantes talla M.

๐ŸŒŸDoña María pidió una blusa talla L de color celeste y lisa. 

๐ŸŒŸDon Cristóbal pidió una camisa talla M.

๐ŸŒŸDoña Antonia pidió una pizza. 

๐ŸŒŸDon Johnny pidió una hamburguesa con papas y Coca Cola.

๐ŸŒŸDon Joaquín pidió una camisa talla S.

๐ŸŒŸDon Carlos Jiménez pidió un queque y una Coca Cola. 

๐ŸŒŸDon Álvaro pidió unas sandalias talla 43 .

๐ŸŒŸDoña Maruja pidió arroz con Camarones y Coca Cola.

๐ŸŒŸDon Tachito pidió pollo frito y  cervezas. 

๐ŸŒŸDon portillo pidió una camisa talla L. 

 ๐ŸŒŸDon Benavidez pidió arroz cantonés y Coca Cola.

๐ŸŒŸDon Carlos Granados pidió una colonia. 

๐ŸŒŸDon Juvenal pidió un litro de Guaro marca Cacique. 

 

Algunas reflexiones personales:

 

 

Me deja entre lágrimas pensar lo fácil que es cumplir estos sueños de navidad, alimentos y artículos personales son cosas que para ellos son difíciles de tener, puesto que muchos de ellos y ellas son abandonados por sus familias y solo cuentan con los recursos que les provee el hogar de ancianos.

 

Algunos de ellos y ellas padecen incapacidades físicas y demencia senil. La falsa tranquilidad que se puede sentir en un hogar de este tipo, puede darnos una pista al responder la pregunta:¿si uno de estos ancianos fuese yo durante mi vejez, cómo me sentiría?. Morimos de soledad y también de amor. 

 

 

No se exactamente las historias de cada uno de ellos. Sin embargo, de otro hogar de ancianos me pude dar cuenta de la falta de amor y atención para con los adultos mayores que tanta falta les hace. 

 

Historias de hijos ingratos y despreocupados con sus padres, los abandonan sin sentir el cariño de sus familias. ¡Si! , lágrimas y vergüenza ajena, quizás siento un poco de coraje. 

 

 

¿Quién soy yo para juzgar?. 

¿Y si este fuese su último sueño de navidad?,¿morirían felices?.

 

Este es un llamado a la consciencia social, porque los que tengan la honra de pintar canas blancas y ser octogenarios alguna vez, podrían ser amados u olvidados por sus familias o ser parte de estos hogares de ancianos hasta terminar sus días terrenales. 

 

 

Bien sabemos que el ser humano merece una vida digna hasta el último de sus días. No quiero llamar al morbo porque estas son personas y hechos reales, así que por favor mantengamos el respeto y sensibilidad. 

 

Es mi deseo que las personas que me leen aprovechen su juventud y su amor, amen mucho y vivian la plenitud de la vida, respeten las canas y nunca ,nunca, abandonen a sus viejos. ¡Respeto y amor a las canas!. Todos llegaremos ahí, si Dios lo permite.