Mis últimas palabras serían,
lo que mis labios trémulos dirían,
y sólo serían estas mis palabras:
Perdón, mi amor.
Y sí, te pido perdón por hacer de ti,
en aquel lejano abril en que, en mi vida,
nunca había sentido el amor tan intenso,
como aquella flor que el aire se llevó.
Y ya en mi alma, muy adentro se posó,
me despido, perdón por llegar a ti,
en el momento que tu corazón,
tenía ya dueño, ocupado por alguien.
Y si, te pido perdón por mis palabras,
por ser dueña de todos mis sueños,
perdón por pensar que me amabas,
perdóname el daño que te he causado,
De ti no debía haberme enamorado,
tú me ayudaste a olvidar el pasado,
Adiós, hoy me alejo de tu lado,
con mis ojos cerrados de tanto llorar,
Con mi corazón a punto de explotar,
con el alma a totalmente quebrada,
te digo adiós sintiéndome cobarde,
escondido entre estas líneas.
Estaré escondido entre los vacíos,
que antes llenaban mis sentidos,
perdón por haberte amado tanto,
Adiós, sólo espero que recuerdes,
Que estaré muy agradecido que tú,
hayas sido parte medular de mi vida,
sí, y aunque sienta el dolor en mi pecho,
aunque mis poesías sean tristes.
y llenas de un vacío tan intenso,
aunque nuestros sueños estén distantes,
de tu realidad y de mi realidad,
Siempre sabrás que te amé,
tan intensamente y verdadero,
adiós, no sé qué expresar más,
mi corazón no sabe que decir ya.