boris gold

LLORÁNDOME

La lluvia golpeaba

con fuerza el vidrio,

esa triste noche

de mi soledad,

con ansias luchaba

aferrado a un milagro.

tal vez los recuerdos

me van...a consolar.

 

Es duro pelearla

solo en una cama,

en la gris y vieja

sala de hospital,

huérfano de amigos

golpeado por la vida,

convoco a fantasmas

de tiempos...atrás.

 

Hoy vino la luna

entró por mis ojos,

alumbró mi alma

y un beso me dio,

en la frente ardiente

sentí su frescura,

ella es buena amiga

cuento...con su amor.

 

Con toda dulzura

me dijo al oído,

te espero allí arriba

poeta soñador,

no penes por nada

fuiste buena gente,

te irás por la senda

que lleva...al señor.

 

Si tengo una chance

de salir de esta,

cambiaré el libreto

por uno mejor,

ayudaré a otros

que arrastran sus pasos,

cargados de angustia

abrazados...a un dolor.

 

Y si debo irme

con boleto de ida,

sin rencor lo acepto

ya que la viví,

estas cosas pasan

a una hora justa,

quizá al buen Borges

lo vea...por allí.

 

   Boris Gold