Esteban Mario Couceyro

Los Ășltimos instantes de Oleksandr

Corren mis piernas

sin pensamientos

las explosiones detienen la mente

me dejo caer

y soporto todo lo que cae sobre mi

el polvo me ahoga

siglos pasan

hasta que puedo respirar.

Incorporo la cabeza

entre las plantas

y todo es calma, como si el ruido

las explosiones

se alejaran llevadas por el viento

adelante un pájaro convulsiona inútilmente

sus alas contra el suelo.

Pasan los silvos de las balas

que nuevamente me dicen…

que no estoy a salvo

disparo mi arma

y los sonidos se detienen

definitivamente

y mi cuerpo corre

mientras disparo

con el destino girando sin sentido

en un espacio ganado por el silencio

y una visión luminosa

que se apodera lentamente

de absolutamente todo

corro y corro

mientras sigo disparando…

 

En recuerdo de Oleksandr, caido en su tierra.