TE BUSCO… Será por costumbre??
Te busco como un indigente que busca un amigo
en sus desvaríos ordinarios.
Te busco en las notas de una canción que repito todos los días.
Te busco en una poesía que escribí ayer y ya no recuerdo el título.
Te busco en el calendario del año pasado.
Te busco en las hojas de un diario que escribí hace 10 años.
Te busco en la poesía que leí ayer y no tenia tú nombre.
Te busco en el aeropuerto por si llegas sin avisar.
Te busco entre mis recuerdos ya son muy pocos, te me olvidas.
Creo que estoy perdiendo la memoria…
O me va a dar eso, eso que dicen que da a ciertos años. ‘Alzhéimer’
A veces tengo miedo porque ya se me olvidan todas las cosas.
Ayer abrí el refrigerador y metí unos zapatos que me gusta ponerme
cuando voy con mis amigas a tomar café.
Esta mañana lloré viendo una película de un cantante que era drogadicto,
su hija va y lo visita al centro de rehabilitación donde esta internado y no la conoce.
Te busco en las páginas de un cuaderno donde escribí poemas para ti y se borraron.
Ya muy poco te recuerdo pero todavía te busco en mensajes de tu correo
pero nunca contestas o si me contestas es para insultarme.
Te busco para platicar cómo antes pero tú ya me mataste y me enterraste.
¡¡Que tiste es la vida yo amándote y tú enterrándome!!
Veo la vida pasar, y creo, qué estoy más cerca de la muerte.
Creo que un día es un día menos de vida.
Y que a vuelta de año ya no estaré.
¡¡Quiera Dios y me recuerdes bonito como la mujer que te amo hasta morir!!
Por eso quiero perder la memoria para no recordar que me hiciste mucho daño.
Te busco como si fuera ayer cuando durábamos platicando horas enteras y no queríamos
despedirnos, estábamos enviciados a estar juntos, nos acostumbramos a tenernos,
y a sabernos uno del otro, hay muchos secretos que solo tú y yo conocemos,
nadie más sabe y nadie más lo sabrá.
Todavía quisiera que te quedaras conmigo como antes, pero ahora somos unos
extraños, eras mi maestro, amante, novio, amigo y hasta mi padre cuando
me regañabas. Extraño todo de ti y te busco en cada mirada, en cada boca,
en cada abrazo, y en cada hombre estoy deseando que seas tú.
No habrá más tiempo para nosotros, ni despedidas, ni charlas, ni juegos, ni poesías
que nos unan, o nos junten, en un beso de despedida.
Te sigo buscando en mis noches sin dormir, y en mis días de soledad.
No me alegra que estés solo me da tristeza verte en esa foto de ayer donde te ves cansado.
Te busco con ganas de volver a sentirte cerca de mí…. ¡Y no estás!
¡¡No estás porque nunca estuviste!! ¡¡Se feliz, aunque no sea conmigo!!
Tal vez esto sea lo último que te escriba.
Me persigue la soledad y la muerte está más cerca.
¡¡La depresión no es un mito, es una realidad a la que nadie presta atención!!
A veces ya no vivo, ni sueño, ni lloro, ni canto, ni río, ni amo, ni me amán.
Solo me olvido de que existo… no estoy, y no existo para nadie.
Te sigo buscando en cualquier gente, quiero verte y pero voy distraída.
¡¡Me acostumbré a ti y la costumbre es más fuerte que el amor!!
Alicia Pérez Hernández... México
No es la pluma la que escribe, es el alma
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