Freddy Kalvo

Pensarte...

 

¡Pensarte me hace feliz!

Porque vuela el pensamiento

como vuela la perdiz

y también la codorniz

cuando va pasando el viento.

 

¡Pensarte es maravilloso!

Es como el azul del cielo

extenso, muy luminoso,

cuando el sol se pone brioso

y los pájaros en vuelo.

 

¡Pensarte es pura alegría…!

Desbordándose cual río

con el agua limpia y fría

que en su cauce bañaría

aunque muera yo de frío.

 

¡Pensarte es como la vida!

Sin la vida nada existe

ni aún el agua llovida

o la llama que encendida

en mi pecho tú encendiste.

 

¡Pensarte es como el reflejo!

Que se aloja en mi retina

como imagen del espejo

como rico vino añejo

que al beberlo me fascina.

 

Pensarte para olvidarte,

en la vida es contrapunto.

¡Nunca dejo de pensarte!

Y si has de ser la obra de arte…

¿Quién te pinta, me pregunto?

 

Pensarte en horas nocturnas,

alienta mucho el embrujo.

Y en todas mis horas diurnas

con mis manos taciturnas...

¡Yo te pinto y te dibujo!