Miguel Angel Garrido

SONETO DEL AMOR LEJANO

Son horas de lluvia y luz descosida,

olor a otoño bajo un cielo sin alma.

Amor, tú róbame el tiempo y la calma

como una Circe en Eea, guarda mi vida.

 

Al caer el alba, rosa y dormida,

tu dulce hechizo la pena me ensalma.

O el brillo tenue en esa hoja de palma,

la tierra de luz y sueño vestida.

 

Mas, para que lo entiendas, todo pasa.

El viaje de mi vida, dónde espera:

hoy no sé qué hacer por esta fría casa.

 

Me noto triste y en ruinas, hechicera,

acepta que tu fuego ya no me abrasa

y sigo aquí, muy lejos y a tu vera.