Mirta Elena Tessio

En nuestra piel y en la memoria.

Hubo un tiempo de luz en mi horizonte

de humedad y el beso en mi almohada

un abril y un septiembre en nuestras bocas,

y el febril temblor en las miradas.

 

El tiempo se ha quedado en mi retina

el que me diera mis mejores horas

no me pesa el haberte amado tanto

porque en mi vive presente

nuestra aurora.

 

Sí, hubo un tiempo en que sentí la gloria

y sigue en mi sangre fluyendo esa hoguera,

que supiste encender como el Olimpo

en mi alma que por siempre añora.

 

El tiempo se ha quedado en mis pupilas

con el rostro del amor que hoy germinan,

los recuerdos del ayer que fueron bellos

y los de hoy que jamás terminan.

 

El amor que en ti procuro

como druida, como celta

la diosa que dibujas,

en mis manos se pegaron

y quiero darte en el afán de mi locura,

sin equipaje mi amor y mi ternura.-

 

El tiempo se ha quedado en esta piel

quien reclama la tuya como miel:

voy a tejer con mis conjuros

el bello telar de nuestra historia

que fueran hoy, que fueran siempre

incluyendo el ayer.-

 

Hubo un tiempo de amarnos,

de tomarnos de las manos

que han quedado en nuestras almas,

fiel historia soldada bella flama

en nuestra piel y en la memoria.-