alicia perez hernandez

Tú, que nunca serás mío…

Tú, que nunca serás mío…

Me eres ajeno, te veo y te desconozco, ya no veo en ti aquel hombre

que una vez tanto amé, tanto, que me perdí en ti, en ese hombre maravilloso.

…Y dejé de ser yo, para ser más tú, y sentí soñar tus sueños, viví tu dolor por ese amor.

Sentí tu soledad y viví tu tristeza, me quedé, y vi tus ojos apagarse, con el tiempo.

Me vacié en ti, toda, me vacié en ti, y de mí no quedo nada, nada para darte.

Me di a ti con un alma soñadora, ilusionada, engreída de haber conquistado

Tu corazón, creí alcanzar el cielo en tus brazos, cuando me abrazabas, sentí

arder la sangre en mis venas, sentí morir en tu boca mis besos de fuego.

Agonicé como un lobo herido, cada vez que te ibas, de mí Moria de dolor.

Te fuiste tantas veces, que sin alma me quedé, porque te di mi alma frágil,

Y mi carne, espíritu y pasiones, sofoqué desde adentro, el dolor de perderte.

Entre tantos espejos llenos de promesas, rompí mi promesa, y te abandoné ayer.

Me vestí de luto, te recé novenario, lloré sin dormir días y noches sin ti.

Y me dije: ¿vale la pena? ¿Amar tanto a esté hombre? Sufrir tanto por amor?

Por esté amor no correspondido ¡¡No hay manera de volver atrás, Amor!!

Solo veo con tristeza tu lugar vació en la cama, en la silla, en la bañera,

Y en mi corazón, tuvo que pasar tanto tiempo para darme cuenta que

mi cuerpo deseo muchas noches el aroma del tuyo, mi piel con los poros

abiertos, repetía tu nombre todas las noches, morí el día de tu despedida.

Y escribí tantos poemas que no me cupieron más en el cuaderno, todos

eran para ti, poemas llenos de amor, de deseos en noches en que me tocaba

las piernas, pensando en ti, los senos evocaba tu nombre, fuiste el único hombre,

que vio mis senos desnudos, eras tan especial para mí, pero nunca lo notaste!!

Tengo recuerdos en las noches, que no me dejan dormir, todo lo que platicábamos.

Todas esas cosas importantes nos unieron a los dos, canciones, poemas, chistes,

Tu voz, tu voz sigue sonando en mis oídos, como un romance de novela, tus poemas,

Yo te hice el amor con tus poemas, mil veces, y en todas esas veces me provocaste

orgasmos, eres especial, pero lo que fue, ya no será, sufrí, lloré y grité de dolor,

cuándo escribí está carta de despedida. ¡Amándote como te amo, te digo adiós!

Tú hubieras sido muy feliz conmigo y yo hubiera sido muy feliz contigo, hubiéramos  

amanecido abrazados en las noches de soledad, pudimos llorar juntos de tristeza,

 Más, si duermo en tus brazos y me hundes en tu pecho y mis senos acaricias

con tu piel desnuda, me haces muy felices, adiós, Amor. Ojos míos, de mi querer!!

Al fin comprendo, que llegué tarde a tu vida. Ya No estás en mi lista cuando busco Amor.

Ni siquiera supimos ser amigos, algo tan fácil, cuando charlábamos y nos entendíamos.

Tú, que nunca serás mío, siempre seré tuya… Me resisto, más me tiene toda!!

Alicia Pérez Hernández... México
No es la pluma la que escribe, es el alma
Todos los derechos reservados©

Yo soy esa mujer que vive alerta,
tú el tremendo varón que se despierta
en un torrente que se ensancha en río,

y más se encrespa mientras corre y poda.
Ah, me resisto, más me tiene toda,
tú, que nunca serás del todo mío.

Alfonsina Storni

https://www.youtube.com/watch?v=JcAy4cyedvg