Norberto Osvaldo Algarin

Jotabé

Amo la lira apolínea de Grecia 
porque la ajada zampoña desprecia. 

Esa zampoña de cruel agonía 
no es más que de azoramiento, que guía 
al país de la cruel Melancolía
donde habita Medusa, diríase. 

En cambio la helénica lira la espera 
con pagano jolgorio a Primavera. 

Esa lira al sollozo menosprecia; 
que Orfeo crespo con su melodía, 
¿no alzó la piedra y amansó a la fiera?