Angel Reyes Burgos

Descubriendo a Dios

Un día yo descubrí

al acercarme a tu altar

que mi vida estaba vacía

si a mi lado tu no estas.

 

Yo te llamaba señor

pero tu no respondías,

cuanta sordera la mía, 

aunque mi madre me hablaba,

a ella no la escuchaba

por que en ti yo no creía.

 

De tantos años pasados

de sufrimiento y dolor,

no puedo negar mi Dios,

que aunque falto de talento,

si no fuera por tu aliento

la vida ya no tuviera,

si me negaras el sustento

de tu gracia salvadora.

 

Perdóname si algún día

en mi ignorancia supina

como Pedro te negué,

pues no supe comprender

aquel quien eres y seras

y perdona mi vanidad

pues en este punto y hora,

para mi o mi señor,

eres la luz interior

que mi corazón no ignora.

 

Ángel Reyes